Los discos de mi vida, por Marta Delmont

Marta Delmont (87)Rp

Volvemos con la sección “Los discos de mi vida”. No los de quien escribe estas líneas, claro, sino los de una serie de artistas nacionales que conforman, según nuestra modesta opinión, la flor y nata actual del panorama musical nacional.

Por aquí pasarán bandas y artistas de todo tipo para entregarnos la selección definitiva: los cinco discos más importantes de sus vidas, en orden cronológico y asociándolos a sus recuerdos más preciados. Una bonita forma de conocer un poco más a nuestros artistas nacionales favoritos.

Cuando Joana Serrat montó Great Canyon Records, su propio sello discográfico, Marta Delmont fue su primera apuesta. Nacida como Marta Ruiz Cayuela en 1997, esta cantautoray guitarrista barcelonesa se mueve por los mismos terrenos estilísticos que su mentora, practicando un sonido country-americana amable, sencillo y ligero, que cristalizó en Silver Blaze, su álbum de debut. Integrada en la formación con la que Serrat defendió en directo Cross The Verge, su último trabajo, Ruiz también contó para su estreno con la misma nómina de colaboradores habituales de la comunidad Great Canyoners, a la postre institucionalizada en el recién creado sello: la propia Joana Serrat, su hermano Toni, los fundamentales Miguel Kersley y Bernat Sànchez –segunda apuesta del sello, bajo el nombre Murdoc–, además de Ryan Boldt y Gavin Gardiner.

Pero más allá del buen arrope con el que Marta Delmont pudo contar para poner de largo sus composiciones, éstas destacan por su ondulada frescura, por su capacidad evocadora y por filtrar de manera prístina una serie de influencias muy puras y ordenadas. Influencias que vemos claramente reflejadas en la selección de los cinco discos que más han marcado su vida. Así que gracias, hermano de Marta, por ayudar a construir a una artista.

BOB DYLAN – Blood On The Tracks (1975)

¿Cuándo lo descubriste? La primera vez que lo escuché debía tener 10 años. Cuando descubrí a Dylan descubrí la música tal y como la entiendo ahora, se me abrió un mundo.

¿Qué significó para ti? Probablemente es el artista (y en concreto, el disco) que más me ha hecho madurar, en muchos sentidos. A lo largo de los años he querido entender qué era exactamente lo que me fascinaba de su música y llegar más allá en sus letras, sus personajes… nunca te lo acabas.

Un momento vital asociado: Hace años un periódico, no recuerdo cual, publicó una colección que incluía prácticamente toda la discografía de Bob Dylan con las letras y Biography, su autobiografía. Mi hermano compraba un tomo cada semana. Fue entonces cuando me metí realmente en este disco, recuerdo perfectamente leer una y otra vez las canciones mientras escuchaba el disco.

REDD KROSS – Third Eye (1990)

¿Cuándo lo descubriste? Por casualidad, en plena época teenager. Siempre había visto ese disco en una estantería de mi casa, pero la portada me parecía TAN fea que nunca me atrajo escucharlo.

¿Qué significó para ti? Fue una lección de “no juzgar el libro por la portada” en toda regla. Probablemente, si lo descubriera a día de hoy no me impactaría tanto, pero en aquel momento fue increíble. Yo tenía la cabeza en los sesenta y los setenta, poco más, y de pronto me encontré con aquello, que parecía pop sesentero pero no dejaba de ser punk, e incluso tenía un punto hortera que me flipó… era muchas cosas a la vez, y todas molaban. Intento tener cero prejuicios con la música desde aquel disco.

Un momento vital asociado: En aquel momento empezaba a tocar la guitarra… me veo intentando tocar ‘I Don’t Know How to be Your Friend‘ con mucha dificultad. Y recuerdo ir a verlos en directo y meterme por primera vez en un pogo. Sí, yo en un pogo, fíjate.

NACHO VEGAS – El Manifiesto Desastre (2008)

¿Cuándo lo descubriste? Me metí de pleno en la música de Nacho Vegas cuando tenía 15 o 16 años. A una parte de mí le encantan las cosas que la ponen triste, y escucharlo a él me dejaba por los suelos. Ahora intento moderar este lado masoquista, muy sano no debe de ser.

¿Qué significó para ti? Me supuso una etapa muy introspectiva, me hizo replantearme muchas cosas. Y definitivamente fue uno de los discos que me llevaron a querer hacer mi propia música.

Un momento vital asociado: Tengo grabada en la mente la primera vez que lo escuché y como me descolocó. También recuerdo enseñarle a alguien alguna de las canciones más oscuras y que me dijeran que no les gustaban, que les hacían sentir mal. Me sorprendió mucho, porque a mí precisamente lo que me fascinaba era esa capacidad de incomodar, lo crudo que podía llegar a ser.

THE BLACK CROWES – Before The Frost…Until The Freeze (2009)

¿Cuándo lo descubriste? The Black Crowes siempre ha sido uno de mis grupos preferidos. Mi hermano lo encargó cuando salió en preventa… una edición increíble, con dos vinilos en verde y blanco. Aún me arrepiento de no haber pedido otro para mí, porque cuando se fue de casa se lo llevó, y no lo volvieron a fabricar.

¿Qué significó para ti? Para mí, ese disco es el momento álgido del grupo. Fue la primera banda cuya evolución seguí a lo largo de los años, viendo cómo se reinventaban. Me hicieron interesarme por la música actual, no tirar siempre del pasado, y es algo que cada día aprecio más: ver la música como algo vivo, y poder formar parte de ello.

Un momento vital asociado: Cada invierno era prácticamente obligatorio ver el DVD del disco con mi hermano (el mismo que me dejó sin disco), envueltos en una manta. Él está muy presente en todos estos recuerdos porque es quién realmente me ha inculcado la música desde pequeña.

STRAND OF OAKS – HEAL (2014)

¿Cuándo lo descubriste? Recuerdo que les vi en el cartel del Primavera Sound de 2015 y escuché el disco para probar suerte, como tantos otros, pero este fue un flechazo. Lo mismo me pasó con Lost In The Dream de The War On Drugs, que se me ha quedado fuera de la lista.

¿Qué significó para ti? Fue algo muy inspirador, me marcó muchísimo. Primero me enamoré del sonido y la atmósfera que tiene, pero cada vez que lo escuchaba me transmitía más. Creo que me he tragado todas las entrevistas a Tim Showalter que hay en You Tube, me emociona la forma en que siente la música.

Un momento vital asociado: El Primavera Sound de aquel año y él tocando con lágrimas en los ojos. Precisamente era el momento en que empezaba a tomar forma mi proyecto, fue una época preciosa.

Foto de portada de Pablo Luna Chao.